Este maravilloso viaje surgió de la forma más inesperada, queríamos volver a Italia como en tantas ocasiones, pero buscábamos algo que fuera un poco diferente, así que cogimos un mapa y buscamos, acabamos decidiendo que sería La Valeta(Malta), así que dejábamos Italia para otra buena ocasión.Tocaba mirar y mirar, buscando el mejor precio posible, mientras tanto íbamos informándonos de que ver, que hacer y de las costumbres del país.Ya teníamos todo atado, aquí comenzaba nuestra nueva aventura!
COMO LLEGAR
En tan solo dos horas de vuelo,llegábamos al Aeropuerto Internacional de Malta.Una vez recogidas las maletas nos dirigimos al servicio de bus para desplazarnos hasta la Valeta.En tan solo unos veinte minutos estábamos en la ciudad, la línea de bus que nosotros cogimos es la X4, el billete nos costó unos 4 euros los dos.También nos informamos de si existía alguna tarjeta turística para moverse por la isla y donde la podíamos conseguir, hay varias modalidades de tarjeta y nosotros compramos la explore plus con el bus nocturno incluido por 39 euros cada uno, viajes ilimitados y es la mejor forma para desplazarse, además incluye viaje en ferry, en bus Hop On Hop Off y un montón de ventajas más.
Nos bajamos al lado de la Galería de arte Víctor Pasmore, en la estación de buses que se encuentra justo al lado, ahora tocaba llegar hasta el hotel dando un plácido paseo con las maletas y tomar el primer contacto con la ciudad de La Valeta, tan solo debíamos caminar unos metros hasta llegar al hotel La Falconeria, la verdad que en unos diez minutos ya estábamos en la recepción.
HOTEL LA FALCONERIA
Hotel La Falconeria, 62 Melita St, el hotel se encuentra en una calle con un encanto muy especial, edificios muy típicos y verdaderamente estaréis en el corazón de La Valeta.La recepción es de aspecto agradable, no demasiado grande pero muy bien ambientada, personal eficiente y atento.A nosotros nos encantó, patio interior y habitaciones muy bien distribuidas, el edificio es toda una obra de arte.La entrada principal tiene un estilo muy señorial con su suelo de mármol y la escalinata que le da el toque de distinción.La decoración está muy cuidada, guarda un toque modernista y la combinación le da mucho encanto.La guinda del pastel la pone la terraza que tiene en la azotea unas vistas espectaculares, ideal para relajarse después de un largo día descubriendo la ciudad.El hotel dispone de fitness y piscina cubierta, que aunque no la uséis os recomendamos que hagáis una visita.Teníamos el desayuno incluido y es muy correcto.
Si os apetece descubrir la isla sin prisas y a vuestro ritmo el hotel también dispone de alquiler de coches.
Os recomendamos este hotel, es ideal para pasar unos días románticos y especiales, no decepciona y como dispone de restaurante os podéis tomar una noche solo para dos!
PRIMERA TOMA DE CONTACTO
Una vez instalados en el hotel y habiéndonos tomado un tiempo de descanso, nos fuimos a la calle a descubrir la ciudad! Ya visualmente nos pareció encantadora y apuntaba que nos iba a gustar mucho.Aunque nos habíamos comprado una guía en una librería para saber que podíamos hacer y ver, pedimos un par de mapas en el hotel como de costumbre.Lo que más queríamos hacer en la primera toma de contacto con la ciudad era acercarnos al Lower Barrakka Gardens, pequeño pero precioso parque desde donde queríamos disfrutar de unas vistas al mar, a la ciudad y sobre todo al atardecer, no decepciona nada.Esta visual maravillosa de la ciudad hace entender al momento porque es patrimonio de la humanidad por la Unesco.Desde este lugar podréis disfruta de las tranquilas aguas de sus bahías, de la llegada o salida de algún crucero, de las piedras amarillas que contrastan con el sol y forman sus espectaculares edificios fortificados.Grandes acontecimientos históricos tuvieron que suceder aquí, ya que los cañones de defensa y la gran muralla que la rodea no os dejarán indiferentes y darán rienda suelta a vuestra imaginación, intentando plasmar por un momento algún relato de antaño.Verdaderamente entendimos que es el mejor sitio para empezar a descubrir esta maravillosa joya en medio del Mediterráneo.La ciudad no es nada difícil de caminar, ya que las calles son paralelas entre ellas tanto en vertical como en horizontal.Una vez entrada la noche solo quedaba pasear en la tranquilidad, cenar y esperar hasta la mañana siguiente para empezar a caminar esta bella ciudad.
DESCUBRIENDO LA CIUDAD
En el día de hoy decidimos empezar nuestra visita desde la fuente del Tritón, que se encuentra al lado donde nos dejó el bus a nuestra llegada a Malta.Desde este lugar teníamos la entrada a las murallas de la Valeta y acceso a la ciudad como caballeros medievales, las puertas de la ciudad nos daban la bienvenida.Pasando el puente y atravesando las murallas, lo primero con lo que nos encontramos fue la casa del Parlamento, edificio de obra nueva pero diseñado de tal forma que parecen grandes bloques sacados de la muralla que rodea la ciudad, es la sede del Parlamento de Malta y este punto que os dará la bienvenida es el inicio de la calle Republic, una de las principales de la Valeta, donde encontraréis tiendas, bancos, cafés, restaurantes, etc.
El Parlamento se encuentra sobre las ruinas de La Ópera Real, de la que tristemente no queda prácticamente nada después de que fuera destruida por un bombardeo en la segunda guerra mundial, lo poco que quedó se convirtió en un teatro al aire libre, evidentemente nada que ver pero que también tiene su encanto ya que forma parte de la historia de la ciudad.
Justo al lado se encuentra San James Cavalier, es una fortificación construida por la Orden de San Juan de Jerusalén.Esta fortificación forma parte de la muralla de la ciudad y se encuentra en el Bastión de San James.Hoy en día es un centro cultural, aunque también se propuso para ubicar el Parlamento.
CONCATEDRAL DE SAN JUAN
Adentrándonos en la calle Republic y justo al lado del Parlamento Maltés está la Plaza del Teatro Real, donde se encuentra el teatro al aire libre con las ruinas de lo que fue un bellísimo edificio.Lo que queda es entretenido para ver aunque no es demasiado espectacular, a nuestro gusto desentonan bastante las butacas verdes del interior, ya que le dan un aire un poco fosco.Paseando por la calle localizaréis la iglesia de Santa Bárbara y la Iglesia de San Francisco de Asís, veréis que la calle está repleta de gente de un lado a otro, en nuestro paseo nos entretuvimos apreciando las fachadas y los balcones de los bonitos edificios que hay a ambos lados, llegando hasta la Concatedral de San Juan, esta iglesia fue construida por los caballeros de la Soberana Orden Militar y Hospitalaria de San Juan de Jerusalén de Rodas.El exterior del edificio no desentona nada con la ciudad, ya que tiene el mismo color y piedra que el resto, a destacar las dos torres construidas de tal manera que parecen que forman parte de la muralla, disponen de balaustrada y seguramente también servían como torres de vigilancia, además hay que destacar las tres campanas que se encuentran en una de ellas y que indica que servían de aviso en caso de invasión, los tres relojes que hay suponemos que tienen origen de los relojes de sol que antes se instalaban en las torres medievales, las cuales están terminadas con dos puntas que sostienen unas veletas para detectar por donde sopla el viento, no hay que olvidar que la ciudad fue un punto neurálgico donde salían y entraban barcos.La entrada con su gran puerta de madera está acompañada de dos columnas que soportan una balconada, desde donde seguramente saldría el alto cargo de la orden.
El interior es de una riqueza que os dejará con la boca abierta, ya que nada que ver con el exterior de estilo barroco y altamente decorado, muros tallados, techos abovedados, un excelente altar y encontraréis plasmada la vida de San Juan Bautista.Dentro hay ocho capillas dedicadas a las lenguas del mundo y a diferentes santos, verdaderamente es toda una obra de arte que no tiene desperdicio y de visita obligada.Si os fijáis en el fabuloso suelo, veréis que hay enterrados caballeros de la orden, lápidas realizadas en mármol y que plasman el escudo que portaba el caballero y relata los hechos en sus batallas y su vida.
A destacar los lienzos que se encuentran donde se plasma la vida de San Juan Bautista, el más llamativo quizá sea la Decapitación de San Juan Bautista de Caravaggio.
Para los amantes de los museos, justo al lado se encuentra el Museo Nacional de Arqueología y la Biblioteca Nacional de Malta, también veréis muy cerca el Palacio de Justicia.
PALACIO DEL GRAN MAESTRE
La ciudad no dejaba de sorprendernos y siguiendo nuestra ruta llegamos a la Plaza de San Jorge, bonita y sencilla plaza con edificios de construcción fortificada y que nos condujo hasta el Palacio del gran Maestre, sede de la Presidencia de la República de Malta.Es uno de los primeros edificios de la ciudad y casa de Eustaquio del Monte, sobrino de Jean de la Vallette, fundador de la ciudad.Bonito y espectacular palacio, justo al lado se encuentra la armería de palacio, donde albergan las armas de la orden de San Juan, es una de las colecciones más grandes del mundo en armas y armaduras.Si sois amantes de las armas medievales podréis visitar este precioso museo donde os recreareis con la historia que guarda en su interior, la entrada nos costó 20 euros los dos y mereció la pena sobre todo el palacio.Desde el exterior podréis disfrutar de las preciosas calles en cuesta y la vida cotidiana de los lugareños.Tomaos un momento y pasead tranquilamente por la zona y descubriréis detalles que os alegrarán la vista, fachadas impresionantes, bonitos balcones y además si os apetece podréis disfrutar de un paseo en coche de caballos por la ciudad.
Desde allí y para culminar nuestro día nos dirigimos al Fuerte de San Telmo, se encuentra justo en la punta de la península y vigila los dos puertos de la ciudad.Grandes batallas navales se produjeron desde este punto, la historia habla de grandes batallas sin precedentes.Hoy en día es la academia de policía de Malta.Aquí se encuentra el Museo Nacional de la Guerra y alberga una gran colección ordenada cronológicamente.La visita nos costó 20 euros los dos y se pueden ver grandes patios de armas, además de artilugios antiguos y otras curiosidades.
DONDE COMER
Restaurante Panorama, 267 St Ursula Street, magnífico restaurante sobre la bahía con vistas de ensueño para una buena velada, disfrutaréis de una panorámica fabulosa de la ciudad de La Valeta, este restaurante se encuentra en el Gran Hotel Harbour, precioso edificio en esquina con balcones típicos de Malta.La calle donde se ubica es bastante romántica, si vais en buena compañía, la velada se hará interminable.Ofrecen comida mediterránea, lo mejor los pescados, pero también dispondréis de carnes.El salón es modernista y muy bien ambientado, toda una delicia para pasar una agradable noche, en el salón de al lado dispone de sofás para tomarse una copa.Nosotros cenamos a la carta y no decepciona, precios muy razonables y comida muy rica, nos costó 95 euros.
Restaurante Mandraggio, Misrah Mattia Preti,este pequeño restaurante se encuentra ubicado en una bonita plaza donde montan las mesas para comer y cenar, el ambiente es bastante local y juvenil pero para comer es ideal.Lo más demandado son la pizzas, pero también podréis disfrutar de platillos marineros a base de pescado.Aunque en el interior encontraréis unas seis mesas muy bien distribuidas os recomendamos que aprovechéis la terraza exterior y la brisa del mar, que está justo al lado, nosotros estuvimos para comer y nos costo unos 30 euros, lo que más sube la cuenta son las bebidas.
Restaurante Scoglitti, 8 Triq il-Lanca Marsamxett, cerca de la terminal de ferry Sliema se encuentra este precioso restaurante, parece un hangar de la época.Local marinero con unas espectaculares vistas al mar y a la ciudad, bien distribuido y decorado con manteles que destacan con el color rojo y blanco de las sillas, el interior es amplio pero lo mejor del sitio es evidentemente la terraza, sobre todo para ir a cenar y disfrutar del atardecer.El marisco es fresco y los arroces están espectaculares, nosotros estuvimos para cenar y nos costó alrededor de 75 euros.
Restaurante Palazzo Preca, 54 Strait Street, el nombre ya lo indica y la verdad que os sentiréis como reyes, espectacular restaurante, la fachada del edificio ya te presta a entrar y aparte de comer o cenar podrás descubrir esta joya.Amplios salones muy bien decorados con lamparas de cristal y espejos, las mesas revestidas en blanco y un suelo muy bonito.La comida es presentada muy delicadamente, buena y en la medida justa, dispone de una amplia carta de vinos donde poder escoger el mejor que se adapte a vuestros gustos.De sus muros en piedra cuelgan los certificados de excelencia que les han sido otorgados, nosotros fuimos para cenar y nos costó alrededor de 85 euros.Muy recomendable para pasar una velada romántica.
COMPRAS Y CONSEJOS
Malta es un lugar espectacular y evidentemente volveremos cuando tengamos otra oportunidad.Es el lugar ideal para relajarse y encontrar la libertad necesaria para disfrutar.
En la calle Repubblicka de La Valeta encontraréis toda la vida de la ciudad, donde comprar, comer, pasear, disfrutar de museos y muchas cosas más!
Aparte de los lugares más conocidos, hay también sitios sorprendentes donde dejarse llevar y perder la noción del tiempo, visitar todo el país es una experiencia que nunca olvidaréis.
Para viajar a Malta si pertenecéis a la unión europea solo necesitaréis vuestro documento de identificación, aunque nosotros siempre que viajamos nos llevamos el pasaporte.
La moneda es el euro y los idiomas oficiales son el inglés y el maltés, si vuestra procedencia es diferente a la europea podréis cambiar vuestra moneda en el aeropuerto o en las entidades bancarias de vuestro país.
Malta es un país nada peligroso, pero como en todos las ciudades europeas siempre hay que tener a buen recaudo vuestras pertenencias.No olvidéis que sois turistas, hay que ser respetuosos con la gente local y ellos lo serán con vosotros.
La ciudad de La Valeta no es demasiado grande y es ideal para caminar y pasear, ya que tampoco está nada masificada de tráfico, llevaos zapatos cómodos ya que las calles tienen una inclinación considerable.Si disponéis de tiempo, os recomendamos que alquiléis un coche para moveros por esta bella isla, no tiene desperdicio.
Los precios son bastante asequibles, pero evidentemente también hay sitios caros.De todo para todos los gustos.
Aparte del turismo que entra en el país vía aérea, también hay turismo de crucero, con lo cual encontraréis colas para acceder a los lugares más reconocidos de la ciudad.
Malta es de clima mediterráneo y está muy cerca de África, los veranos son secos y calurosos y los inviernos suaves.
La comida es mediterránea y sobre todo bastante especializada en pescados, no perdáis la oportunidad de probar los manjares del mar en los restaurantes que hay en sus orillas, es toda una experiencia.
Los locales son bastante agradables y si preguntáis estarán encantados de ayudaros.
Si os apasiona lo medieval, desde luego que este es el sitio ideal para impregnaros de esta cultura.
¡Feliz estancia en Malta!.
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